Audiencia 24 enero 2024. PP Francisco

Proseguimos las catequesis sobre los vicios y las virtudes, y hoy vamos a hablar de la avaricia, es decir, aquella forma de apego al dinero que impide al ser humano ser generoso.

No es un pecado que concierne solamente a las personas que poseen ingentes patrimonios, sino un vicio transversal que a menudo no tiene nada que ver con el saldo de la cuenta corriente. Es una enfermedad del corazón, no de la cartera.

Los análisis que hicieron los padres del desierto sobre este mal sacaron a la luz que la avaricia podía apoderarse también de los monjes, quienes, tras haber renunciado a enormes herencias, en la soledad de su celda se habían atado a objetos de poco valor: no los prestaban, no los compartían y aún menos estaban dispuestos a regalarlos. Un apego a pequeñas cosas que quita la libertad. Esos objetos se volvían … Continuar leyendo

Mensaje del Prelado (22 enero 2024)

Queridísimos: ¡que Jesús me guarde a mis hijas y a mis hijos!

En mis últimos mensajes, me he referido a la necesidad de rezar por algunas intenciones: la paz en el mundo –especialmente en Tierra Santa, Ucrania y Rusia–, la Iglesia –en estos días en particular pedimos por la unidad de los cristianos– y la Obra –la adecuación de los Estatutos y las Asambleas regionales–. Aunque sé que las tenéis muy presentes, pues todos las sentimos muy nuestras, en este primer mensaje del año desearía animaros a intensificar vuestra oración por estas intenciones.

«La oración, esa es nuestra fuerza: no hemos tenido nunca otra arma» (San Josemaría, Carta 17-VI-73, n. 35). Todas las dimensiones de nuestra vida se pueden convertir en un diálogo constante con Dios. Por tanto, en cualquier momento podemos elevar nuestras peticiones al cielo. Esta es una realidad que nos llena de … Continuar leyendo

Audiencia 17 enero 2024. PP Francisco

Queridos hermanos y hermanas, ¡buenos días!

Hoy escuchemos bien la catequesis, porque después tendremos un circo que actuará aquí para entretenernos.

Continuemos nuestro itinerario sobre los vicios y las virtudes; y los antiguos Padres nos enseñan que, después de la gula, el segundo «demonio», es decir vicio, que está siempre agazapado a la puerta del corazón es el de la lujuria. Mientras que la gula es la voracidad hacia la comida, este segundo vicio es una especie de «voracidad» hacia otra persona, es decir, el vínculo envenenado que los seres humanos mantienen entre sí, especialmente en el ámbito de la sexualidad.

Entiéndase bien: en el cristianismo no se condena el instinto sexual. Un libro de la Biblia, el Cantar de los Cantares, es un maravilloso poema de amor entre una pareja de novios. Sin embargo, esta hermosa dimensión de nuestra humanidad, la … Continuar leyendo

Audiencia 10 enero 2024. PP Francisco

En esta catequesis meditamos sobre la gula, la locura del vientre como la llamaban los Padres antiguos. Jesús nos ha enseñado a ser capaces de amar la sana alegría de las bodas de Caná; a sentar a nuestra mesa a los pobres y a los pecadores, en signo de comunión; a no sujetarnos supersticiosamente a reglas de impureza, sino considerar todo como un don de Dios, confiado a nuestra custodia.
Sin embargo, cada vez más nuestra sociedad da muestras de haber perdido el sentido auténtico de la relación con los bienes de la tierra. Muchos trastornos alimenticios expresan el sufrimiento de tantas personas ante esta realidad. Hemos pasado de ser administradores de los bienes divinos, a ser consumidores, detentores de una voracidad insaciable que está destruyendo el planeta.

Mensaje del Prelado (15 diciembre 2023)

Queridísimos: ¡que Jesús me guarde a mis hijas y a mis hijos!

En las fiestas de Navidad, es lógico que sigamos teniendo muy presentes los conflictos que sacuden la tierra de Jesús y el resto del mundo. Sabernos hijos de un mismo Padre nos lleva a considerar lo que sucede en todas partes como algo muy próximo, muy nuestro. «Si sufre un miembro, todos los demás sufren con él» (1 Co 12,26). Procuremos ser generosos en oración y sacrificio, sabiendo que «el menor de nuestros actos hecho con caridad repercute en beneficio de todos» (Catecismo de la Iglesia Católica, n. 953). Al mismo tiempo, pidamos al Señor su gracia para que esa preocupación por la paz en el mundo nos lleve también a formular propósitos concretos, a hacer lo que está de nuestra parte para llevar la paz a nuestros propios ambientes de familia, de trabajo, … Continuar leyendo

Audiencia 27 diciembre 2023. PP Francisco

La semana pasada entramos en el tema de los vicios y las virtudes. Este nos llama a la lucha espiritual del cristiano. De hecho, la vida espiritual del cristiano no es pacifica, linear y sin desafíos, al contrario, la vida cristiana exige un continuo combate: el combate cristiano para conservar la fe, para enriquecer los dones de la fe en nosotros. No es casualidad que la primera unción que cada cristiano recibe en el sacramento del bautismo – la unción catecumenal – sea sin perfume y anuncie simbólicamente que la vida es una lucha. De hecho, en la antigüedad, los luchadores se ungían completamente antes de la competición, tanto para tonificar sus músculos, como para hacer sus cuerpos escurridizos a las garras del adversario. La unción de los catecúmenos pone inmediatamente en claro que al cristiano no se salva de la lucha, que un cristiano debe luchar: su … Continuar leyendo