Audiencia 25.5.16. PP Francisco

Queridos hermanos y hermanas ¡buenos días!

La parábola evangélica que acabamos de escuchar (cfr. Lc 18, 1-8) contiene una enseñanza importante: “que es necesario orar siempre sin desanimarse” (v. 1). Por lo tanto, no se trata de orar algunas veces, cuando tengo ganas. No, Jesús dice que es necesario “orar siempre sin desanimarse”. Y pone el ejemplo de la viuda y el juez.

El juez es un personaje poderoso, llamado a emitir sentencias basándose en la Ley de Moisés. Por esto la tradición bíblica recomendaba que los jueces sean personas con temor de Dios, dignas de fe, imparciales e incorruptibles (Cfr. Ex 18,21). Nos hará bien escuchar esto también hoy, ¡eh! Al contrario, este juez «no temía a Dios ni le importaban los hombres» (v. 2). Era un juez perverso, sin escrúpulos, que no tenía en cuenta la Ley pero hacía lo que quería, … Continuar leyendo