Carta Prelado, mayo 2016
Queridísimos: ¡que Jesús me guarde a mis hijas y a mis hijos!
Comienza el mes mariano por excelencia, en el que procuramos situar la devoción a la Virgen en el centro de nuestras jornadas. Muchos de nosotros recordaremos las prácticas aprendidas en la infancia: oraciones dedicadas a nuestra Madre —quizá el rezo del rosario en familia—, ofrecimiento de pequeños sacrificios, adornos florales junto a las imágenes de Santa María…; por eso, sugiero a los padres y madres de familia que viváis estos gestos, llevando con vosotros a vuestros hijos pequeños. Os ayudará leer y meditar lo que el Santo Padre escribe sobre el trato entre los miembros de la familia, en su reciente exhortación apostólica.
Comportémonos así también, siguiendo las sugerencias y consejos de nuestro Padre, para que sea responsabilidad de todas y de todos «hacer hogar» en la Obra, conscientes … Continuar leyendo