Audiencia 1.4.2020. Catequesis del Santo Padre

Hoy leemos juntos la sexta bienaventuranza, que promete la visión de Dios y tiene como condición la pureza de corazón.

Un salmo dice: «Dice de ti mi corazón: ‘Busca su rostro’. Sí, Yahvé ,tu rostro busco. No me ocultes tu rostro» (27:8-9).

Este lenguaje manifiesta la sed de una relación personal con Dios, no mecánica, no algo nublada, no: personal, que el libro de Job también expresa como signo de una relación sincera. Dice así el libro de Job: «Yo te conocía sólo de oídas, mas ahora te han visto mis ojos» (Jb 42:5). Y muchas veces pienso que este es el camino de la vida, en nuestra relación con Dios. Conocemos a Dios de oídas, pero con nuestra experiencia avanzamos, avanzamos, avanzamos y al final lo conocemos directamente, si somos fieles… Y esta es la madurez del Espíritu.

¿Cómo llegar a esta … Continuar leyendo