Carta del Prelado (Julio 2014)
Recientemente hemos celebrado las solemnidades litúrgicas del Corpus Christi y del Sagrado Corazón de Jesús, y la memoria del Inmaculado Corazón de María. Estas fiestas nos muestran la senda hacia la bienaventuranza eterna: introducirnos en el Corazón llagado de Jesús, de la mano de Nuestra Señora. Luego, en la solemnidad de san Pedro y san Pablo, hemos reforzado nuestra unión con el Romano Pontífice, con su persona y sus intenciones; a la vez que hemos aumentado nuestro afán de llevar a Cristo a las gentes. De este modo, una vez más, hemos seguido el consejo de nuestro Padre: omnes cum Petro ad Iesum per Maríam!
El 26 de junio, en muchos lugares, es ya tradición honrar a Dios con la celebración del Santo Sacrificio en honor de san Josemaría. Pido que, por su intercesión, haya muchos frutos espirituales en todos esos sitios y en el mundo … Continuar leyendo